¿Por qué es importante elegir bien la mesa de centro?
La mesa de centro es el punto de encuentro visual de tu salón. Es ese elemento que equilibra el espacio entre el sofá y el resto de la decoración, y que además aporta practicidad en el día a día. Por eso, su elección influye tanto en el diseño como en la funcionalidad de la estancia.
Asimismo, es uno de los muebles más versátiles. Puede servir para apoyar el café de la tarde, dejar los mandos de la tele, exponer libros y revistas o incluso convertirse en el soporte perfecto para un centro de flores. Así que elegirla bien significa optimizar todo eso sin sacrificar el estilo.
¿Cómo elegir la mesa de centro ideal según tu espacio?
El primer paso para acertar está en observar el tamaño de tu salón y la disposición de los muebles. Un espacio pequeño pedirá una mesa ligera y proporcionada, mientras que un salón amplio puede permitirse una mesa más robusta o incluso un conjunto de varias mesas auxiliares.
También debes considerar la circulación. Lo ideal es dejar al menos 40-50 cm entre la mesa y el sofá o las butacas, para moverte con comodidad. Este detalle es clave para que tu salón no se sienta apretado.
Aspectos clave para elegir una mesa de centro
Forma y tamaño
La forma de tu mesa debe adaptarse tanto al espacio como a tus hábitos. Las mesas rectangulares son las más comunes y encajan muy bien en salones alargados, mientras que las redondas o cuadradas suavizan el ambiente y facilitan la circulación. En cambio, si buscas un toque original, las mesas ovaladas o irregulares pueden aportar dinamismo.
En cuanto al tamaño, la regla de oro es que la mesa tenga aproximadamente dos tercios de la longitud del sofá. De esta manera, se mantiene la proporción visual y resulta cómoda para todos los asientos. Y si tu salón es muy reducido, puedes optar por mesas nido o de cristal, que visualmente ocupan menos espacio, pero siguen siendo funcionales.
Altura adecuada
La altura es un detalle que a veces pasamos desapercibido, pero que marca una gran diferencia en la comodidad. Lo más conveniente es que la superficie de la mesa esté a la misma altura o ligeramente por debajo del asiento del sofá, normalmente entre 40 y 45 cm.
En caso de que quieras elegir una mesa de centro y comer en ella ocasionalmente, considera modelos elevables que permitan ajustar la altura sin renunciar al diseño.
Materiales y acabados
Del mismo modo, la elección del material definirá tanto la estética como el mantenimiento de tu mesa. La madera brinda calidez y combina bien con la mayoría de estilos, el cristal ofrece ligereza visual y el metal agrega un toque moderno o industrial.
Si buscas durabilidad, fíjate en la resistencia de la superficie a golpes, rayaduras y manchas. Por ejemplo, una mesa lacada puede ser muy elegante, pero requerirá más cuidados que una de madera maciza.
Funcionalidad: fija, elevable o con almacenaje
No todas las mesas de centro cumplen la misma función. Por lo que si solo la usarás para apoyar objetos decorativos, una mesa fija y ligera será suficiente. Pero si buscas versatilidad, las mesas elevables permiten comer o trabajar cómodamente en el sofá.
Por otro lado, si integra almacenamiento, como cajones o compartimentos ocultos, y tienes un salón pequeño, será una apuesta segura. Así, mantienes el orden sin mucho esfuerzo.
Estilo decorativo y armonía con el salón
Por supuesto, el estilo de la mesa debe encajar con la estética general del salón. Un espacio minimalista agradecerá una mesa de líneas limpias, mientras que un salón rústico pedirá madera natural y acabados más orgánicos.
Puedes jugar también con el contraste. En un salón clásico, una mesa moderna puede dar frescura; y en uno contemporáneo, una pieza vintage puede ser un punto focal. Eso sí, cuida que haya un hilo conductor, ya sea colores, materiales o formas que dialoguen con el resto del mobiliario y la decoración. De este modo, todo se sentirá cohesionado.

Errores comunes al elegir mesa de centro y cómo evitarlos
Uno de los errores más frecuentes es dejarse llevar solo por la estética y olvidar la funcionalidad. Una mesa preciosa pero incómoda, frágil o poco práctica terminará siendo un estorbo.
Otro fallo común es no medir bien el espacio. Comprar a ojo puede resultar en una mesa que no deja suficiente paso o que parece desproporcionada en la habitación. También es habitual descuidar la coherencia decorativa. Por muy bonita que sea una mesa, si no encaja con el resto del salón creará un efecto visual caótico.
Consejos finales para elegir la mesa de centro perfecta
Ahora bien, antes de decidirte, haz una lista de lo que necesitas e incluye dimensiones, materiales, estilo y funcionalidades. Esto te ayudará a filtrar opciones y evitar compras impulsivas. Y si tienes dudas, opta por diseños versátiles y atemporales que puedas adaptar fácilmente si cambias la decoración del salón más adelante.
En definitiva, elegir la mesa de centro ideal es un equilibrio entre estilo, tamaño, materiales y funcionalidad. Por esta razón, debes tomarte el tiempo para analizar tu espacio y tus necesidades. Así, además de ser un elemento bonito, será también práctico y duradero.
Y si no sabes donde encontrar la mesa de centro perfecta (y mucho más), no te preocupes. En Wanderlust Deco te invitamos a descubrir nuestra selección pensada para que cada rincón de tu hogar hable de ti. ¡Echa un vistazo ahora a nuestra tienda online y no te quedes sin tu mesa de centro!

MARIA ROSARIO MICÓ VALLS
Administrativo contable de Wanderlust Deco